martes, 20 de marzo de 2012

Nostalgia

Supongo que no todos pueden permitirse el lujo de sentir nostalgia, sólo unos pocos afortunados tenemos ese placer. Afortunados como yo.
Para mí la nostalgia es llorar toda la noche y que a la mañana siguiente me escuezan los ojos tanto que hasta me moleste la luz del sol a través de las nubes, pero también es sonreír y llegar a soltar alguna que otra carcajada. También consiste en mirar fotos, ver las entradas del día que fuimos al cine, hablar con la marioneta que me hiciste con un calcetín como si fueras tú,...
Eres mi nostalgia, o más bien, el causante de mi nostalgia. 
Tal vez, si no estuvieras tan lejos, yo no podría ser una de esas privilegiadas por sentir todo esto. Que a veces duele, pero otras tantas veces, me da tanta vida.

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