Yo me resguardo del frío, tú te desatas el corazón.
Yo me hago cargo, y venero cada rincón que me encuentro mientras bendigo mi suerte y este calor del invierno.
Por todo y también por eso, y por no saber si es para siempre, y por todo lo que significa, es por lo que tiemblo al verte...
No hay comentarios:
Publicar un comentario