jueves, 14 de mayo de 2009

Con penas a miles...

Y por un momento, esta tarde se paró el tiempo...Entonces, mientras aquella lágrima recorría mi cara, comprendí que todo volvía a empezar de cero.
Otra vez unas simples palabras tuyas me habían hecho llorar, otra vez sentía esas terribles ganas de vivir, otra vez poníamos fecha en el calendario para nuestro próximo encuentro.


Casi dos años después de que comenzára este sentimiento, vuelvo a darle una nueva oportunidad...


---------------------------------------------------



Mientras tanto se cierran, las heridas de tus sábados pero ¿sabes?, a ratos vuelven a supurar y vuelve a costarme repirar... Entonces me acuerdo, que eras tu el que últimamente me daba aire, me daba vida, y desde hace un mes... no lo has hecho.
Y me ahogo, me ahogo como lo hago cada vez que te tengo enfrente y tú me salvas con tus manos...
No pueden pasar muchos más sábados sin verte, no puedo pasar ni un sábado más sin mis noches, tus noches, mis inseguridades, tus locuras, tus abrazos y besos... no puedo pasar más sábados sin tí.
Ya lo hice una vez, pero volveré a definirte como mi droga de cada sábado y tengo mono...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

No sabía del desierto

No sabía que también había desiertos que desembocaban en el mar. Recuerdo cómo durante aquellos primeros meses del año, un sentimiento devas...