viernes, 12 de noviembre de 2010

And the reason is you

Inocente.
Inevitable.
Ilusionada.


Y no aprendo. Cabezabajo. Yo que pensaba que...
Sigo en mi línea.
¿Quién me mandaría meterme en tu nido?
El encanto de lo extraño, filtrado en la piel.
Tan especial, tan diferente, tan oscuro, tan... igual!

Tan tan tan, Inocente.

Parece mentira, siempre caigo, inevitable.

Aun así, es una nueva meta, ilusionada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

No sabía del desierto

No sabía que también había desiertos que desembocaban en el mar. Recuerdo cómo durante aquellos primeros meses del año, un sentimiento devas...