domingo, 7 de marzo de 2010

Vertiendo minutos de arena

"Yo sé que vendrá a desquitarse.
Él sabe que me ha de encontrar, por las mismas callejas vendiendo tumbos, sin rumbo, coraje, ni prisa vertiendo minutos de arena y haciendo sendero al caer..."


Aun recuerdo aquellos meses en que me intenté convencer a mi misma de que eras lo que necesitába. Me estába planteando una nueva vida, estabilidad y eso que todos llaman 'amor'.
Pero no se puede forzar a nadie para que sienta y yo me forcé demasiado. Toda tu prefección se redujo a nada conforme pasában los días. Igual aguantamos mucho o no lo suficiente, pero fuiste tú el primero en tirar la toalla.
Lloré y fue ahí cuando me di cuenta que realmente me importábas tanto como para empezar esa relación que tu tanto ansiabas desde hace un año.
Y nos equivocamos, tanto tú como yo, cada uno a su manera. Yo por no saberte valorar a tiempo y tú, por no darme ese tiempo para saberte valorar.
Cuatro meses después me pides un abrazo. Cuatro meses después me haces sentir celos y tú también los sientes. Cuatro meses después y con un margen de tiempo más amplio, sé que nos volveríamos a besar. Porque cuatro meses después, nuestro reencuentro me supo a poco.

Y siento si ni yo misma me aclaro. Sigo en mi línea y tú en la tuya.
Bohemio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

No sabía del desierto

No sabía que también había desiertos que desembocaban en el mar. Recuerdo cómo durante aquellos primeros meses del año, un sentimiento devas...